Miguel Ángel Rodríguez se fue de vacaciones al Caribe mexicano y regresó con una idea de negocio. Hasta ese momento, año 2007, él era un alumno de la carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública que trabajaba en una oficina del Gobierno Mexicano. Pero en aquel viaje notó que los souvenirs que vendían en las tiendas eran de baja calidad y no tenían nada de novedoso. Algunos productos, incluso, tenían mensajes ofensivos contra la cultura mexicana (por ignorancia de la historia y por agravios contra el país). “En Cancún hice un recorrido por las tiendas y realmente fue triste ver lo que le queremos vender a los extranjeros: playeras mal hechas, baratas, con mensajes vulgares, ordinarios, corrientes”, dice Rodríguez. Por esto, decidió que él mismo crearía una marca de ropa y accesorios para turistas. Escogió un nombre que busca expresar sorpresa por los diseños que él crea: ¡Ay Güey!
“Aquí es donde desfogué mi vocación frustrada de político”, dice Rodríguez sobre su trabajo. En sus productos muestra mensajes sobre el pasado de su país y también sobre los sucesos sociales que pasan. A pesar de que no terminó la carrera universitaria, cree que lo aprendido le sirvió para diferenciarse de la competencia. Quizá es uno de los pocos productores de souvenirs que fabrica a partir de un sustento teórico.
DOS MERCADOS
En el camino, Rodríguez se dio cuenta de que no solo los turistas compraban su mercadería, sino también los jóvenes mexicanos. Por eso ahora su red de casi 20 tiendas se ubican tanto en lugares de descanso (Oaxaca, por ejemplo), como en zonas urbanas. “Utilizo las playeras como un vehículo para traducir la cultura mexicana y hacerla masiva. Somos un pueblo ignorante de nuestra propia historia”, dice.
La cultura mexicana es tan conocida en el extranjero que las prendas de ¡Ay Güey! ya se exportan a Estados Unidos, España, Alemania y Suiza. “Estoy buscando crear una cadena de tiendas, como lo han hecho las marcas extranjeras, y tener puntos de venta en todo el mundo, ofreciendo la imagen de un México que no tiene nada que ver con la violencia”, planea Rodríguez. Para esto ya cuenta con la certificación de la marca país mexicana.
“Aquí es donde desfogué mi vocación frustrada de político”, dice Rodríguez sobre su trabajo. En sus productos muestra mensajes sobre el pasado de su país y también sobre los sucesos sociales que pasan. A pesar de que no terminó la carrera universitaria, cree que lo aprendido le sirvió para diferenciarse de la competencia. Quizá es uno de los pocos productores de souvenirs que fabrica a partir de un sustento teórico.
DOS MERCADOS
En el camino, Rodríguez se dio cuenta de que no solo los turistas compraban su mercadería, sino también los jóvenes mexicanos. Por eso ahora su red de casi 20 tiendas se ubican tanto en lugares de descanso (Oaxaca, por ejemplo), como en zonas urbanas. “Utilizo las playeras como un vehículo para traducir la cultura mexicana y hacerla masiva. Somos un pueblo ignorante de nuestra propia historia”, dice.
La cultura mexicana es tan conocida en el extranjero que las prendas de ¡Ay Güey! ya se exportan a Estados Unidos, España, Alemania y Suiza. “Estoy buscando crear una cadena de tiendas, como lo han hecho las marcas extranjeras, y tener puntos de venta en todo el mundo, ofreciendo la imagen de un México que no tiene nada que ver con la violencia”, planea Rodríguez. Para esto ya cuenta con la certificación de la marca país mexicana.
hola mi nombre es natali yo tambien quiero hacer un plan negicio de souvenires la verdad yo tengo la idea pero en lo tecnico no se como empesar grasias si tu me puedes ayudar te lo agradecerí
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