Puerto del Callao: ¿Gigantesca Expansión hacia el Norte?

El puerto del Callao está recibiendo importantes inversiones. Gracias a ellas, a principios del año puso en funcionamiento, en el Muelle 5, sus dos primeras grúas pórtico, y actualmente viene construyendo la primera etapa del gran Muelle Sur, con el cual duplicará su capacidad de carga.

Además, está en plena evaluación la interesantísima propuesta presentada por Dubai Ports (DP), operadora de este último muelle, para construir el gigantesco Muelle Norte, propuesta que, dadas sus evidentes ventajas, muy probablemente será aprobada y sacada a licitación, para ver si se interesa en ella alguna otra empresa o consorcio, además de DP.


Asimismo, está en estudio la propuesta presentada por el consorcio Transportadora del Callao (recientemente constituido, y conformado por las empresas mineras Perubar, Chinalco, El Brocal y Cormin, a las que se ha sumado Santa Sofía Puertos, que sería la empresa operadora), para construir, en el rompeolas norte (ver imagen de arriba), un muelle marginal de unos 300 metros de largo, especializado en minerales. En ese apartado lugar, no perturbaría las operaciones del puerto, ni alteraría mayormente los planes de convertir al Callao en un puerto dedicado exclusivamente al movimiento de contenedores, el sistema de carga que, por su gran eficiencia, se ha impuesto en el mundo.

Actualmente, el mineral es transportado en camiones desde los depósitos situados en las afueras del puerto hasta el muelle 5 (ver gráfico de abajo), donde es colocado en el piso, para ser embarcado. Ese sistema, además de altamente contaminante (especialmente en el caso del plomo), provoca una gran congestión de dichos vehículos, siendo, por lo tanto, ineficiente y costoso. Y la situación se agravaría desde el 2012, cuando la gigantesca Toromocho comience a producir y exportar.


Con el nuevo muelle, en cambio, habría mucho más espacio, y el embarque sería mediante un equipo especializado y una faja transportadora hermética de 4 kilómetros de largo (cuyo recorrido está señalado por la línea azul en la primera imagen), que llegaría hasta allí directamente desde los depósitos situados en la parte exterior del puerto. Sin perturbar, sin contaminar y con mucha eficiencia.

Además, gracias a la nueva infraestructura, las empresas del sector podrían permanecer en el Callao, un puerto del que no desean retirarse (pese a los muelles mineros que están previstos en Ventanilla, Végueta y Chancay), debido a las ventajas que ofrece, entre ellas su ubicación estratégica, su excelente conexión ferroviaria, y porque allí se encuentran, como ya se dijo, los grandes depósitos de concentrados.

Dicho proyecto, que demandaría una inversión de US$ 96.5 millones, estaría terminado en el año 2012, justo a tiempo para atender las necesidades de Toromocho. Con su construcción, quedaría resuelto el problema de los embarques mineros durante los siguientes 20 ó 30 años. Pero lo más interesante podría venir, tal como veremos, en el largo plazo.

El Megapuerto
Dado que el movimiento total de TEU (contenedores de 20 pies de largo) en los muelles Sur y Norte (si se llegara a construir este último) llegaría a 4.5 millones de unidades en el año 2025, aproximadamente en el 2030 ya se requeriría una ampliación del puerto. Consciente de eso, y previsoramente, el MTC ya comenzó a auscultar posibilidades y alternativas. En tal sentido, el año pasado encargó un estudio a la consultora internacional Typsa-Tegepsa, la cual ha formulado una interesantísima propuesta.

Teniendo en cuenta que ya no habría espacio al interior de la rada, se plantea algo mucho más ambicioso: rebasar los actuales límites y expandir el puerto hacia el norte, más allá del rompeolas. Así, se incrementaría sus capacidades sin congestionarlo en absoluto.

Tal como se observa en la imagen siguiente, en una primera fase (3A, que se ejecutaría aproximadamente a partir del año 2030) se construiría la primera etapa de un gran muelle y patio para contenedores, que tendría una longitud de 600 metros y un área de 27 hectáreas.
En ese momento, y siempre con la idea de no perturbar las operaciones del puerto, la faja transportadora variaría su recorrido, ingresando por el lado norte de la nueva infraestructura y desembocando, con su carga de concentrados, directamente en su muelle, sin acceder en ningún momento al interior de la rada.


Luego, en el 2035 (Fase 3B), el citado muelle de contenedores crecería otros 550 metros y 24 hectáreas, con lo cual superaría ampliamente en tamaño al Muelle Sur. En su lado sur podrían acoderar dos buques de grandes dimensiones. Además, se construiría el nuevo rompeolas, por el cual discurriría desde entonces la faja transportadora, que desembocaría en el nuevo muelle minero a ser construido cerca de la bocana de ingreso al puerto.


Posteriormente, en el año 2040, continuaría la ampliación de dicho muelle, con el fin de generar (Fase 4) un nuevo y enorme espacio (también de 1150 metros de largo) para contenedores. Allí, en su lado norte, podrían acoderar otros dos grandes buques.

El broche final a esta espectacular secuencia de proyectos lo pondría un segundo gran muelle (Fase 5 en el gráfico), que sería construido en el extremo norte, aproximadamente en el año 2050.


Obviando los detalles del Muelle Norte, este video nos da una buena idea acerca del megaproyecto

Cabe precisar que todos los proyectos descritos, con excepción del muelle de la primera imagen (que sí forma parte de la propuesta formal ya alcanzada a la Autoridad Portuaria Nacional-APN), son sólo planteamientos. Eso sí, bastante serios, pues han sido elaborados, y muy recientemente, por la prestigiosa consultora internacional Typsa-Tegepsa, a solicitud del MTC, y con el natural entusiasmo de los gremios que ven en ellos la posibilidad de mejorar su competitividad exportadora de largo plazo. Además, ya están en conocimiento, aunque extraoficialmente y como simples propuestas a futuro, de la APN. Dada su trascendencia, no sorprendería que la idea de su ejecución comenzara a madurar con el correr del tiempo. Obviamente, como un proyecto de muy largo plazo.

Si se llegara a concretar, el panorama del Callao cambiaría por completo. Nuestro principal terminal duplicaría su tamaño y se convertiría en un enorme megapuerto.

Imágenes: APN y SNMPE

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente