Tomar medidas para reducir los índices de robo influye directamente en una mejora del negocio, y facilitar los procesos de compra a los consumidores incide en el crecimiento de las ventas. De ahí la importancia de proteger con fiabilidad los productos y favorecer al mismo tiempo una mejor exposición en el establecimiento.
El punto de venta es, cada vez más, un lugar de interacción emocional con el comprador, que disfruta de su experiencia de compra merced a soluciones de seguridad que promueven la exhibición abierta de los productos. Para el cliente, el contacto directo con el producto es esencial en su experiencia: ver, tocar, sentir, palpar el artículo es una condición esencial para decidirse a comprar. A los consumidores les gusta manipular y probar los artículos antes de comprarlos. Uno de los incentivos de compra consiste, precisamente, en acceder al producto con libertad antes de adquirirlo. El comprador reclama liberarse de las trabas de seguridad que esconden el artículo y lo encierran.
Mejorar la experiencia del cliente
El Etiquetado en Origen, la aplicación de etiquetas antihurto desde la manufactura o el empaquetado de productos, es clave para favorecer la mejora en esa experiencia del cliente. Es un sistema que crece velozmente y la distribución lo ha estandarizado con finalidades de protección como vemos, cada vez más a menudo, en muchos productos, porque es un valor añadido para el artículo, que le ayuda a estar en los primeros puestos del lineal, incrementando sus ventas y a la vez reduciendo el impacto de la pérdida desconocida. Entre las líneas prioritarias para el uso de este sistema destacan perfumerías, licores, cosméticos, DVD / CD, videojuegos, software, aparatos electrónicos, ropa de diseño, etc.
El proyecto de Etiquetado en Origen es reconocido porque mejora la eficiencia del negocio en toda la cadena ya que permite ahorrar por reducción de merma. Facilita la venta de productos en libre servicio sin que peligre la seguridad, lo que contribuye a un aumento claro de las ventas. El etiquetado oculto e integrado está a prueba de manipulaciones.
El Etiquetado en Origen supone una auténtica revolución en los modelos de negocio facilitando la comercialización de productos de manera atractiva, potenciando su venta, acabando con la exposición condicionada de artículos encerrados bajo llave. Además de deshacerse de las voluminosas cajas de seguridad, el minorista reducirá la pérdida de espacio en las áreas de exposición y el comprador disfrutará de su compra manipulando el producto, comparando y obteniendo más y mejor información acerca de él. Favorece la libre exposición de productos y el acceso sin barreras a productos de valor.
Nuevas tendencias
La mejora de eficiencia también afectará a los fabricantes porque, aunque los productos estén más protegidos, se potencia una mayor visibilidad y la eliminación de envoltorios o envases excesivos, con lo cual, la apariencia es sustancialmente más atractiva.
Las nuevas tendencias en gestión de Pérdida Desconocida en la Distribución tienden a combinar, cada vez más, la prevención del hurto con la publicidad y promoción del producto. El Etiquetado en Origen es clave para conseguir la conjunción de ambos factores, indispensables para rentabilizar con mayor éxito un negocio. El impacto de este sistema de etiquetado en la imagen del artículo es mínimo y permite ubicar los productos protegidos en lugares privilegiados de la tienda, además de maximizar las técnicas de merchandising.
Apostando por el Etiquetado en Origen, el distribuidor consigue disminuir el nivel de hurto en su negocio, pero también simplificar las tareas que se realizan en las tiendas. Se reducen o incluso se eliminan los costes de trabajo asociados con el etiquetado y los artículos llegan al punto de venta listos para su comercialización y sin necesidad de manipulación. La mejora en la cotidianidad del establecimiento es evidente: reducción de tiempo, de costes, de manipulado de productos y una gestión precisa del inventario. El empleado puede dedicar su tiempo a atender al comprador.
La mayoría de los minoristas que utilizan el Etiquetado en Origen RF observan un aumento de los beneficios de hasta el 25 %. Es un proceso que se implementará en función de la rentabilidad de cada familia, categoría o producto. Por su sencilla incorporación a los procesos de fabricación y su rápida desactivación en el punto de venta, el Etiquetado en Origen aportará un valor añadido a los productos, convirtiéndose en una auténtica revolución para el sector y los nuevos modelos de negocio.
Distribución Actualidad, 13 de mayo
El punto de venta es, cada vez más, un lugar de interacción emocional con el comprador, que disfruta de su experiencia de compra merced a soluciones de seguridad que promueven la exhibición abierta de los productos. Para el cliente, el contacto directo con el producto es esencial en su experiencia: ver, tocar, sentir, palpar el artículo es una condición esencial para decidirse a comprar. A los consumidores les gusta manipular y probar los artículos antes de comprarlos. Uno de los incentivos de compra consiste, precisamente, en acceder al producto con libertad antes de adquirirlo. El comprador reclama liberarse de las trabas de seguridad que esconden el artículo y lo encierran.
Mejorar la experiencia del cliente
El Etiquetado en Origen, la aplicación de etiquetas antihurto desde la manufactura o el empaquetado de productos, es clave para favorecer la mejora en esa experiencia del cliente. Es un sistema que crece velozmente y la distribución lo ha estandarizado con finalidades de protección como vemos, cada vez más a menudo, en muchos productos, porque es un valor añadido para el artículo, que le ayuda a estar en los primeros puestos del lineal, incrementando sus ventas y a la vez reduciendo el impacto de la pérdida desconocida. Entre las líneas prioritarias para el uso de este sistema destacan perfumerías, licores, cosméticos, DVD / CD, videojuegos, software, aparatos electrónicos, ropa de diseño, etc.
El proyecto de Etiquetado en Origen es reconocido porque mejora la eficiencia del negocio en toda la cadena ya que permite ahorrar por reducción de merma. Facilita la venta de productos en libre servicio sin que peligre la seguridad, lo que contribuye a un aumento claro de las ventas. El etiquetado oculto e integrado está a prueba de manipulaciones.
El Etiquetado en Origen supone una auténtica revolución en los modelos de negocio facilitando la comercialización de productos de manera atractiva, potenciando su venta, acabando con la exposición condicionada de artículos encerrados bajo llave. Además de deshacerse de las voluminosas cajas de seguridad, el minorista reducirá la pérdida de espacio en las áreas de exposición y el comprador disfrutará de su compra manipulando el producto, comparando y obteniendo más y mejor información acerca de él. Favorece la libre exposición de productos y el acceso sin barreras a productos de valor.
Nuevas tendencias
La mejora de eficiencia también afectará a los fabricantes porque, aunque los productos estén más protegidos, se potencia una mayor visibilidad y la eliminación de envoltorios o envases excesivos, con lo cual, la apariencia es sustancialmente más atractiva.
Las nuevas tendencias en gestión de Pérdida Desconocida en la Distribución tienden a combinar, cada vez más, la prevención del hurto con la publicidad y promoción del producto. El Etiquetado en Origen es clave para conseguir la conjunción de ambos factores, indispensables para rentabilizar con mayor éxito un negocio. El impacto de este sistema de etiquetado en la imagen del artículo es mínimo y permite ubicar los productos protegidos en lugares privilegiados de la tienda, además de maximizar las técnicas de merchandising.
Apostando por el Etiquetado en Origen, el distribuidor consigue disminuir el nivel de hurto en su negocio, pero también simplificar las tareas que se realizan en las tiendas. Se reducen o incluso se eliminan los costes de trabajo asociados con el etiquetado y los artículos llegan al punto de venta listos para su comercialización y sin necesidad de manipulación. La mejora en la cotidianidad del establecimiento es evidente: reducción de tiempo, de costes, de manipulado de productos y una gestión precisa del inventario. El empleado puede dedicar su tiempo a atender al comprador.
La mayoría de los minoristas que utilizan el Etiquetado en Origen RF observan un aumento de los beneficios de hasta el 25 %. Es un proceso que se implementará en función de la rentabilidad de cada familia, categoría o producto. Por su sencilla incorporación a los procesos de fabricación y su rápida desactivación en el punto de venta, el Etiquetado en Origen aportará un valor añadido a los productos, convirtiéndose en una auténtica revolución para el sector y los nuevos modelos de negocio.
Distribución Actualidad, 13 de mayo