El tránsito vehicular, que tantos dolores de cabeza viene provocando a los conductores de Lima (debido a la gran cantidad de obras en ejecución), encontró el día de hoy una cuota de alivio, gracias a la apertura parcial del intercambio vial situado en el cruce de la avenida Habich y la carretera Panamericana Norte. Sólo faltan trabajos menores en la parte baja del bypass, los cuales, sin embargo, no afectan la operatividad de éste.
La obra, iniciada hace poco menos de un año, permitirá descongestionar significativamente la ruta hacia y desde el norte de la ciudad, haciendo mucho más fluido el tránsito. Comprende un viaducto elevado de 650 metros de longitud (con tres carriles en cada sentido), por el que podrán circular todo tipo de vehículos de transporte, tanto público como privado.
Con este intercambio se completa el proceso de mejora de la infraestructura vial de la zona, pues, como se recuerda, hace pocos meses fue puesto en funcionamiento el puente Santa María, que constituye su complemento, al cruzar el río Rímac y permitir una salida directa hacia las avenidas Morales Duárez, Argentina y Colonial. Ambas obras han implicado una inversión conjunta de S/. 67 millones.
De esta manera, Lima sigue modernizando, poco a poco, su infraestructura vial, tratando de recuperar el terreno perdido y ponerse a la altura de otras ciudades de su envergadura.
En los siguientes meses también serán concluidos los intercambios de las avenidas Colonial-Universitaria y Venezuela-Universitaria, y, un poco después, la gran Estación Central, que de esa manera quedará unida, subterráneamente, con las vías expresas de Grau y del Paseo de la República. Esta última reabrirá totalmente transformada, especialmente acondicionada para servir de trazo vial al nuevo sistema metropolitano de buses.
La cereza en el postre de la modernización del sistema limeño de transporte la constituirá, sin duda, el Tren Eléctrico, cuya licitación y entrega en concesión está a punto de concretarse.
La obra, iniciada hace poco menos de un año, permitirá descongestionar significativamente la ruta hacia y desde el norte de la ciudad, haciendo mucho más fluido el tránsito. Comprende un viaducto elevado de 650 metros de longitud (con tres carriles en cada sentido), por el que podrán circular todo tipo de vehículos de transporte, tanto público como privado.
Con este intercambio se completa el proceso de mejora de la infraestructura vial de la zona, pues, como se recuerda, hace pocos meses fue puesto en funcionamiento el puente Santa María, que constituye su complemento, al cruzar el río Rímac y permitir una salida directa hacia las avenidas Morales Duárez, Argentina y Colonial. Ambas obras han implicado una inversión conjunta de S/. 67 millones.
De esta manera, Lima sigue modernizando, poco a poco, su infraestructura vial, tratando de recuperar el terreno perdido y ponerse a la altura de otras ciudades de su envergadura.
En los siguientes meses también serán concluidos los intercambios de las avenidas Colonial-Universitaria y Venezuela-Universitaria, y, un poco después, la gran Estación Central, que de esa manera quedará unida, subterráneamente, con las vías expresas de Grau y del Paseo de la República. Esta última reabrirá totalmente transformada, especialmente acondicionada para servir de trazo vial al nuevo sistema metropolitano de buses.
La cereza en el postre de la modernización del sistema limeño de transporte la constituirá, sin duda, el Tren Eléctrico, cuya licitación y entrega en concesión está a punto de concretarse.