El descenso de la producción vinícola fue particularmente importante en los tres principales productores mundiales, Francia, Italia y España. La producción de vino se redujo en 222 millones de hectolitros en Chile (15.046 millones).
PARÍS.- La producción mundial de vino se redujo un 6,9% en 2007, tras dos ejercicios consecutivos al alza, debido a la caída registrada en la Unión Europea (UE), que no fue compensada por el aumento en otros países, indicó hoy la Organización Internacional del Vino (OIV).
El descenso de la producción vinícola fue particularmente importante en los tres principales productores mundiales, Francia, Italia y España, afirmó en una rueda de prensa en París el director general de la OIV, Federico Castellucci.
La producción vinícola cayó el año pasado un 9,3% en la UE, lo que supone el menor dato registrado en los últimos quince años junto con el de 2002.
En el caso español, la producción de 2007 fue 3.473 millones de hectolitros inferior a la del año anterior, hasta alcanzar los 34.700 millones de hectolitros.
Superior fue el descenso en Italia (7.562 millones), que sigue siendo el mayor productor del mundo con 45.900 millones de hectolitros por delante de Francia, que produjo 45.400 millones, 6.876 millones menos que en 2006.
Razones del descenso
Castellucci atribuyó la caída de la producción en la UE al efecto combinado de la contención de precios, ligada a la super-producción de años anteriores, así como a la política de arranque de viñas fomentada por las autoridades.
En contraste, el responsable de la OIV destacó la subida en la producción en los Estados del hemisferio sur y Estados Unidos, y destacó el incremento registrado en Brasil, país que calificó como "futuro protagonista del mundo vinícola".
La producción brasileña pasó de los 2.372 millones de hectolitros en 2006 a los 3.337 millones del año pasado.
La producción de vino se redujo en 350 millones de hectolitros en Argentina (15.046 millones) y en 222 millones en Chile (15.046 millones), pero creció en Estados Unidos y Nueva Zelanda.
Consumo y exportaciones
En cuanto al consumo de vino, Castellucci señaló que permaneció estable con respecto a 2006, tras cuatro años de ligero aumento.
En la UE se mantuvo la tendencia a la caída del consumo, un fenómeno que Castellucci atribuyó a la pérdida de consumidores tradicionales que están siendo sustituidos por nuevos clientes más exigentes que buscan variedad y calidad.
La OIV constató que la exportación de vinos creció un 7,1% en el mundo. España superó a Francia como segundo exportador mundial de vinos por detrás de Italia.
En lo que se refiere a los precios, la OIV registró un encarecimiento de los vinos en 2007 ligado a la caída de la producción, por lo que Castellucci dio por superada la bajada de precios que la super-producción provocó en 2004.
El responsable de la OIV señaló que el mundo del vino deberá hacer frente en los próximos años al reto del cambio climático y apostó por la aplicación de tecnología para superarlo.
Por otro lado, Castellucci reveló que Argentina ha presentado una demanda formal para ingresar en la OIV, de la que ahora es observador, por lo que su entrada podrá ser efectiva en la próxima Asamblea General que se celebrara en la localidad italiana de Verona en junio próximo.