Tomado de El Nuevo Heraldo de EEUU (Chicago)
Ya muchos hablan sobre bacterias en la comida para bebés y microbios en batidos. Pero no se trata de alimentos contaminados, sino de una tendencia cada vez mayor a producir comidas que ayuden a la salud y no lo contrario.
Son productos que contienen probióticos, o bacterias ''amistosas'', similares a las que se hallan en el sistema digestivo humano.
Hay píldoras suplementarias, yogur, jugos, barras de dulce y cereales, incluso hasta chocolates y fórmulas para bebés. Las venden marcas importantes como Dannon y Kraft, y se están esparciendo como gérmenes en los entrepaños de productos lácteos de los supermercados.
Y vienen con anotaciones de que ''regulan su sistema digestivo'' o ``refuerzan las defensas de su cuerpo''.
Y vienen con anotaciones de que ''regulan su sistema digestivo'' o ``refuerzan las defensas de su cuerpo''.
Los expertos dicen que los probióticos son en general inocuos y en algunos casos pueden ayudar. Se requieren más estudios, y el giro está muy de moda, reflejando un nuevo entendimiento del papel que ocupan en la salud las bacterias de presencia natural en el organismo. Esta semana, el Instituto Nacional de Salud (NIH) tiene una conferencia en la que habrá importantes científicos discutiendo adelantos recientes.
El mercado se ha adelantado a la ciencia, parte de un creciente esfuerzo por aprovechar la obsesión actual con las comidas naturales. Los probióticos son populares en Europa, Asia y Sudamérica.
Y también hay ''prebióticos'', que contienen fibra y otros factores nutritivos que alimentan a las bacterias probiótica.
Hasta ahora en este año, más de 150 productos alimenticios probióticos y prebióticos se han introducido comercialmente en Estados Unidos, comparados con unos 100 el año pasado y sólo 40 en el 2005, según Tom Vierhile de Datamonitor, una compañía de estudios del mercado.
''Decididamente es una tendencia que va en aumento'', afirma Vierhile.
Holly Maloney, instructora de nutrición del Kendall College de Chicago, come unas barras nutritivas probióticas que dicen ser buenas para la digestión y para el sistema inmunológico.
''Decididamente es una tendencia que va en aumento'', afirma Vierhile.
Holly Maloney, instructora de nutrición del Kendall College de Chicago, come unas barras nutritivas probióticas que dicen ser buenas para la digestión y para el sistema inmunológico.
También desde hace mucho consume yogur y kefir, un líquido derivado de leche fermentada que contiene probióticos.
''Me ayudan a sentirme bien'', declaró Maloney, de 32 años, refiriéndose a esos productos. ``Si no los consumo durante unos cuantos días no me siento bien''.
Aunque muchos productos probióticos no han pasado por pruebas científicas rigurosas, existe evidencia inicial de que en grandes cantidades, ciertos tipos de bacterias ''amistosas'' pueden ayudar.
Aunque muchos productos probióticos no han pasado por pruebas científicas rigurosas, existe evidencia inicial de que en grandes cantidades, ciertos tipos de bacterias ''amistosas'' pueden ayudar.