El "Tren Papa", que no es otra cosa que nuestro ferrocarril central fungiendo de transportista agropecuario, hizo ayer un nuevo recorrido desde el valle del Mantaro hasta Lima.
Hace casi exactamente un año (ver aquí) ya había efectuado un viaje similar, a modo experimental, con el fin de explorar la posibilidad de transportar regularmente alimentos mediante esta vía. El que comentamos hoy ratifica la voluntad de hacerlo, y la convicción de que el sistema ferroviario está destinado a ser una principalísima modalidad de abastecimiento alimentario de la capital.
La idea primigenia, tanto de los productores agrarios, como de las autoridades del Ministerio de Agricultura y la empresa Ferrocarril Central Andino, apuntaba a abastecer de esa forma al futuro y enorme Mercado Mayorista de Santa Anita, lo cual requeriría la construcción de un ramal desde la línea principal del ferrocarril hasta la zona de desestiba de dicho centro de abastos.
Pero ahora, ante la demora en la construcción de dicho gran centro de abasto, la idea ha sido tomada por el también extenso centro comercial Minka, ubicado en el Callao, y que tiene la ventaja de que su zona de carga y descarga se encuentra justamente al borde de la línea férrea. Allí fue que se dirigió esta vez el Tren Papa, trayendo desde la sierra central aproximadamente 60 toneladas de productos agrícolas.
Habiendo comprobado que la idea funciona, ahora los funcionarios de Minka pretenden que el tren opere regularmente, efectuando dos viajes al mes durante este año, y que amplíe sus frecuencias en el 2010. Sin duda, una muy buena decisión de su parte.
Las ventajas de emplear el ferrocarril en esta función son significativas. Al obviar a los intermediarios y optar por un sistema de transporte que es 50% más económico que el carretero, los agricultores obtienen una mejor retribución por su producción. Los consumidores, por su parte, se benefician con menores precios de compra. Además, dado que transporta el mismo volumen de carga que un gran número de camiones, se libera a la trajinada carretera central del pesado paso de éstos.
Resulta grato ver que la interesantísima idea del "Tren Papa" madura y ahora se hace realidad, al tener previsto funcionar en forma permanente. Siendo así, estaremos atentos al inicio de sus operaciones regulares.
El tren y su voluminosa carga (Fotos: Andina)
Hace casi exactamente un año (ver aquí) ya había efectuado un viaje similar, a modo experimental, con el fin de explorar la posibilidad de transportar regularmente alimentos mediante esta vía. El que comentamos hoy ratifica la voluntad de hacerlo, y la convicción de que el sistema ferroviario está destinado a ser una principalísima modalidad de abastecimiento alimentario de la capital.
La idea primigenia, tanto de los productores agrarios, como de las autoridades del Ministerio de Agricultura y la empresa Ferrocarril Central Andino, apuntaba a abastecer de esa forma al futuro y enorme Mercado Mayorista de Santa Anita, lo cual requeriría la construcción de un ramal desde la línea principal del ferrocarril hasta la zona de desestiba de dicho centro de abastos.
Pero ahora, ante la demora en la construcción de dicho gran centro de abasto, la idea ha sido tomada por el también extenso centro comercial Minka, ubicado en el Callao, y que tiene la ventaja de que su zona de carga y descarga se encuentra justamente al borde de la línea férrea. Allí fue que se dirigió esta vez el Tren Papa, trayendo desde la sierra central aproximadamente 60 toneladas de productos agrícolas.
Habiendo comprobado que la idea funciona, ahora los funcionarios de Minka pretenden que el tren opere regularmente, efectuando dos viajes al mes durante este año, y que amplíe sus frecuencias en el 2010. Sin duda, una muy buena decisión de su parte.
Las ventajas de emplear el ferrocarril en esta función son significativas. Al obviar a los intermediarios y optar por un sistema de transporte que es 50% más económico que el carretero, los agricultores obtienen una mejor retribución por su producción. Los consumidores, por su parte, se benefician con menores precios de compra. Además, dado que transporta el mismo volumen de carga que un gran número de camiones, se libera a la trajinada carretera central del pesado paso de éstos.
Resulta grato ver que la interesantísima idea del "Tren Papa" madura y ahora se hace realidad, al tener previsto funcionar en forma permanente. Siendo así, estaremos atentos al inicio de sus operaciones regulares.