Asediada cada vez más estrechamente por el ímpetu de la pujante Trujillo, la Blanca Ciudad de Arequipa no quiere perder su condición de segunda metrópoli del país.
En tal sentido, continúa acelerando el paso, evaluando y poniendo en marcha nuevos e importantes proyectos de desarrollo, mediante los cuales busca seguir mejorando su infraestructura económica y social. En esta oportunidad nos referiremos a dos de ellos, que destacan por su belleza y espectacularidad: el Centro Empresarial Arequipa y el Puente Chilina.
El Centro Empresarial
Este hermoso complejo de edificios comenzaría a ser construido en los próximos meses al costado de la avenida Metropolitana, en la zona de Challapampa, muy cerca del centro histórico.
Como se puede apreciar en el render, consta de cuatro torres. Las dos principales, la 1 y la 2 (de 19 y 18 pisos, respectivamente), se convertirían en las más altas de provincias, desplazando a los edificios trujillanos, que desde hace un tiempo vienen ostentando dicho título. La 3 y la 4 (de 15 pisos), estarían a la par de sus congéneres del norte.
Pero lo mejor de los nuevos edificios mistianos no estará en su altura, sino en su elegante y moderno diseño, así como en el entorno que conformarán, como parte de un impresionante centro de negocios, a tono con los requerimientos de una ciudad importante como Arequipa.
Según sus promotores, dicho centro albergará sedes bancarias, compañías de seguros, AFP y oficinas de las principales empresas de la urbe sureña. Además, contará con salas para conferencias y una amplia zona comercial.
La construcción de tan importante infraestructura todavía no está asegurada, aunque, según rumores, se iniciaría en abril. Ojalá, nomás, que la crisis financiera, que viene causando problemas en el financiamiento de varios proyectos, no termine afectando también a éste. Si todo marcha bien, este centro será, sin duda, un espacio digno de una ciudad que, siendo la segunda del país, aspira a mantener tal condición.
El Puente Chilina
El otro proyecto mistiano de características espectaculares es el puente Chilina, que, con sus 670 metros de longitud, se convertiría en el segundo más largo del país, sólo por detrás del selvático Billinghurst, que se halla en plena construcción.
El viaducto estaría emplazado sobre el río Chili, en las inmediaciones del Colegio Militar, y permitiría unir los dos sectores en que actualmente se divide la ciudad, que por fin lograrían una rápida interconexión.
Lamentablemente, en este proyecto las cosas no parecen estar resultando nada fáciles. Al alto costo que tendría la obra (pues no sólo se trataría del puente, sino también de toda una considerable infraestructura vial complementaria) se han sumado algunas críticas de índole técnica, así como el cuestionamiento del Instituto Nacional de Cultura (INC), institución según la cual el puente es "demasiado protagónico" y afecta parcialmente el bello paisaje de la campiña arequipeña.
Si bien, por desconocimiento de los detalles técnicos del proyecto y las características de la zona, no estamos en condiciones de rebatir los cuestionamientos de este tipo, nos parece que, en lo referente a la objeción del INC, hay una cierta miopía, pues un puente de esta envergadura no puede limitarse a ser una fría y humilde plataforma vehicular sostenida por austeras columnas (que, además, tendrían que ser numerosas, dada su longitud).
Este puente, por sus grandes dimensiones, merece hacerse notar y convertirse en todo un símbolo arequipeño. Y qué mejor forma que con unos bellos y grandes arcos, que, aparte de ser magníficos aportes en términos de ingeniería, lo son también en términos estéticos. Estos elementos, lejos de dañar el entorno natural, lo complementan y realzan, dando aún más gracia al ya bello paisaje.
Ojalá, pues, que las dudas que aún existen sobre ambos proyectos se despejen a la brevedad posible, y que la hermosa Arequipa pueda tener, dentro de poco tiempo, dos nuevos, modernos y magníficos íconos urbanos.
En tal sentido, continúa acelerando el paso, evaluando y poniendo en marcha nuevos e importantes proyectos de desarrollo, mediante los cuales busca seguir mejorando su infraestructura económica y social. En esta oportunidad nos referiremos a dos de ellos, que destacan por su belleza y espectacularidad: el Centro Empresarial Arequipa y el Puente Chilina.
El Centro Empresarial
Este hermoso complejo de edificios comenzaría a ser construido en los próximos meses al costado de la avenida Metropolitana, en la zona de Challapampa, muy cerca del centro histórico.
Como se puede apreciar en el render, consta de cuatro torres. Las dos principales, la 1 y la 2 (de 19 y 18 pisos, respectivamente), se convertirían en las más altas de provincias, desplazando a los edificios trujillanos, que desde hace un tiempo vienen ostentando dicho título. La 3 y la 4 (de 15 pisos), estarían a la par de sus congéneres del norte.
Pero lo mejor de los nuevos edificios mistianos no estará en su altura, sino en su elegante y moderno diseño, así como en el entorno que conformarán, como parte de un impresionante centro de negocios, a tono con los requerimientos de una ciudad importante como Arequipa.
Según sus promotores, dicho centro albergará sedes bancarias, compañías de seguros, AFP y oficinas de las principales empresas de la urbe sureña. Además, contará con salas para conferencias y una amplia zona comercial.
La construcción de tan importante infraestructura todavía no está asegurada, aunque, según rumores, se iniciaría en abril. Ojalá, nomás, que la crisis financiera, que viene causando problemas en el financiamiento de varios proyectos, no termine afectando también a éste. Si todo marcha bien, este centro será, sin duda, un espacio digno de una ciudad que, siendo la segunda del país, aspira a mantener tal condición.
El Puente Chilina
El otro proyecto mistiano de características espectaculares es el puente Chilina, que, con sus 670 metros de longitud, se convertiría en el segundo más largo del país, sólo por detrás del selvático Billinghurst, que se halla en plena construcción.
El viaducto estaría emplazado sobre el río Chili, en las inmediaciones del Colegio Militar, y permitiría unir los dos sectores en que actualmente se divide la ciudad, que por fin lograrían una rápida interconexión.
Así se vería el espectacular puente (Fotocomposición: Ykuy)
Lamentablemente, en este proyecto las cosas no parecen estar resultando nada fáciles. Al alto costo que tendría la obra (pues no sólo se trataría del puente, sino también de toda una considerable infraestructura vial complementaria) se han sumado algunas críticas de índole técnica, así como el cuestionamiento del Instituto Nacional de Cultura (INC), institución según la cual el puente es "demasiado protagónico" y afecta parcialmente el bello paisaje de la campiña arequipeña.
Si bien, por desconocimiento de los detalles técnicos del proyecto y las características de la zona, no estamos en condiciones de rebatir los cuestionamientos de este tipo, nos parece que, en lo referente a la objeción del INC, hay una cierta miopía, pues un puente de esta envergadura no puede limitarse a ser una fría y humilde plataforma vehicular sostenida por austeras columnas (que, además, tendrían que ser numerosas, dada su longitud).
Este puente, por sus grandes dimensiones, merece hacerse notar y convertirse en todo un símbolo arequipeño. Y qué mejor forma que con unos bellos y grandes arcos, que, aparte de ser magníficos aportes en términos de ingeniería, lo son también en términos estéticos. Estos elementos, lejos de dañar el entorno natural, lo complementan y realzan, dando aún más gracia al ya bello paisaje.
Ojalá, pues, que las dudas que aún existen sobre ambos proyectos se despejen a la brevedad posible, y que la hermosa Arequipa pueda tener, dentro de poco tiempo, dos nuevos, modernos y magníficos íconos urbanos.