Es tal su importancia que hoy se puede decir, sin mayores objeciones, que los países que no están conectados a esta vital herramienta corren el riesgo de incurrir en una suerte de “analfabetismo tecnológico”, y con ello obstaculizar gravemente su proceso de desarrollo.
Felizmente, las cifras latinoamericanas indican un avance, lento pero sostenido, en esta materia, siendo el promedio de penetración de la región de 22.2%. Es decir, de cada 100 personas, más de 22 ya emplean regularmente el Internet.
Las cifras acerca del número de usuarios han sido tomadas de Internet World Stats, en tanto que las de población provienen de los institutos de estadística de cada país o de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
De acuerdo a los datos, el país más desarrollado en este campo es Chile, que exhibe un nivel de penetración de 42.35%. Le sigue Argentina, que también sobrepasa el 40%. Luego se ubican otros dos países de buen nivel de desarrollo, como Uruguay y Costa Rica.
Sorprendentemente, el Perú se ubica en el quinto lugar, superando, con su penetración de casi 26%, el nivel promedio latinoamericano, y situándose por encima de países más desarrollados en materia de tecnología de la información, como Brasil y México.
Sin duda, nuestro ejército de cabinas, con sus reducidísimas tarifas de aproximadamente US$ 0.30 por hora y su virtual omnipresencia, casi en cada calle de las diferentes ciudades del país, son las que han propiciado este logro, haciendo que la población peruana sea una de las mejor conectadas a la web, a despecho del aún bajo (aunque rápidamente creciente) número de personas que poseen una computadora en su vivienda.
Los dos gigantes regionales, Brasil y México, son, sin duda, los países con mayor cantidad de internautas, pues en conjunto representan el 55% del total latinoamericano. Sin embargo, el nivel de penetración en ambos es aún bajo, al estar únicamente por encima del 22%.
Cerrando la lista, con tasas de penetración inferiores al 5%, se hallan Honduras, Paraguay, Nicaragua y Cuba, países que deberán intentar revertir lo más pronto posible esta preocupante situación, pues de lo contrario se ampliará la brecha tecnológica que ya se comienza a establecer frente a sus vecinos de la región.
El caso de Cuba es especialmente preocupante, pues su indicador apenas supera el 2%, revelando que el Internet casi no existe en ese país. Afortunadamente, vientos de cambio parecen estar sintiéndose allí, por lo que podrían esperarse mejoras sustantivas en los siguientes años.