Habían otras personas que también recorrían ese mismo día los pueblos y caseríos simultáneamente, en un peregrinaje denominado “Intinani”, que en el idioma quechua significa ruta del Sol.
El profesor Santiago Aguí, (Tayta Shanti), explicó que las personas que caminan por estas rutas, adquiere sabiduría y mucha energía, pues es el camino de los cuatro suyos que cruzan del Sur a Norte y del Este al Oeste, es la red vial más perfecta construida por los antiguos peruanos.
Las palabras de Tayta Shanti me animaron a participar de esta aventura y caminar por la ruta del Este, con otras dos personas; pero no pudimos encontrarnos en el momento de la salida, pero además no quería perderme esta oportunidad que se presentó de vivir la experiencia de nuestros antepasados los Incas, quienes caminaban horas y horas bajo el sol quemante o tal vez bajo la lluvia entre rayos y relámpagos.
Me emocionaba la idea de participar de un evento como el que narro y tener un encuentro con otros caminantes que venían del Sur, Oeste y del Norte; para luego hacer una visita junto a ellos, al santuario de “Goñicutac” y al amanecer despedirnos de la “Mama Killa”, horas antes del “Wanu Killa”. (cuando la Luna se va de luna de miel y desaparece durante algunos días de la vista de los humanos).
Sentía que esta caminata sería una especie de "purificación", para poder liberarme de costumbres ajenas y adquirir conocimientos ancestrales. Deseaba dirigir mi mirada al mundo andino, llenarme de energía al pasar por los caminos de la ruta del Sol, y me aventure a realizar este peregrinaje solo y con la confianza que los "jircas" cuidarían de mi.
Es así que luego de caminar hora y horas desde Uspachaca, por caminos angostos, siguiendo un tramo que por muchos años caminaron nuestros antepasados, llegué al distrito de Chaupimarca, donde había pocas personas, el resto se encontraba en sus chacras porque estaban en época de cosecha. Después de un breve descanso seguí con caminando hasta Yacan, pero esta vez el camino no fue tan extenuante. Y mientras hacia mi recorrido por esta zona, se podía apreciar las hermosas riquezas naturales que tiene la provincia de Daniel Alcides Carrión.
Luego, desde Yacán caminé aproximadamente una hora cuesta arriba, para poder llegar a Paucar. Esta vez por caminos angostos, donde solo se escuchaba el ruido del viento. En algunos momentos tenia temor, pero me tranquilizaba cuando encontraba algunos niños “pastando” sus carneros. Entonces a ellos les preguntaba sobre la dirección o camino correcto que debía tomar. No podía pasarme nada en esta “ruta del Sol” y poco a poco, caminaba con más confianza y con la seguridad que los “jircas” me protegen.
En el trayecto cuesta arriba, encontré una pequeña capilla, construida con piedras y barro. Desde allí se podía ver toda la quebrada de Chaupihuaranga y a un costado el pueblo de Paucar, lugar donde pasaría la noche.
Llegué como a las 5.00 de la tarde a Paucar y lo primero que hice fue, preguntar por alguna autoridad como teniente gobernador o presidente de la comunidad. Una señora que vendía truchas a la entrada del pueblo, me indicó dónde podía encontrar a don Israel Toribio Mejia, quien era el presidente de la comunidad. Luego esta misma señora, al enterarse que era un visitante me dijo muy sonriente que había llegado en buena fecha, porque ese día se iniciaba una festividad religiosa al “Tayta Cahuac” (Dios vivo), y que el pueblo cuenta con un hotel municipal para hospedar a todos los visitantes que quieran alejarse del bullicio de la ciudad.
Efectivamente, al llegar observe muchas personas en la Iglesia del pueblo y cada instante se podía escuchar el ruido de los cohetes que anunciaban días de fiesta.
La festividad del Tayta Cahuac
Al día siguiente desperté muy temprano, justo cuando los primeros rayos de Sol acariciaban los tejados de las casas. A esa hora ya habían muchas personas en plaza de Paucar.
Al salir a recorrer este pequeño pueblo, vi que en el interior de la Iglesia habían algunas personas, entre ellas los mayordomos de esta festividad quienes adornaban con flores el altar.
Marcela Morales, una de las mayordomas de este año, me contó que ella es muy devota del Tayta Cahuac y cada año viene desde Estados Unidos para participar de estas festividad religiosa junto a sus familiares.
Aquí también encontré a don Salomé Rivas Chávez, coordinador del Instituto Nacional de Cultura, quien me explico en que consiste esta festividad denominada el “Tayta Cahuac”
“La celebración de esta fiesta costumbrista nace desde una semana antes con la preparación de chicha, después faltando tres días se realiza el “masejo” que viene hacer la preparación de panes. Allí se prepara el trucay, que es como el pan, pero de buen tamaño, que servirá para el “cambio” para el otro mayordomo entrante, y mas otros pancitos para sustento de la fiesta de los tres o cuatro días que celebramos, para todo eso se prepara un día entero los panes.”
“Luego al día siguiente se realiza el “pishtapacuy” que significa cortar la carne, este día se mata reses, chancho, gallina, cuy, todo para los potajes diarios”
“Hoy día ya están en preparativos para la procesión que se realiza el día dos de mayo en la tarde, mientras los mayordomos acomodan las carnes en una tarima de madera. En la primera fila ponen las carnes mas pesadas que son de reses, en el segundo colocan las carnes de animales medianos como son cordero y chancho, en el tercer peldaño van a colgar, los cuyes, gallinas o patos, y en la parte alta se pone una bandera peruana”.
El tres de mayo, nuevamente se realiza una procesión en la tarde, que parte desde la iglesia matriz, hacia una capilla que esta a una distancia de dos kilómetros. Anteriormente se hacia un castillo también en la misma capilla, pero los últimos años se viene haciendo en la plaza del pueblo, nos indica Salomé Rivas.
El día 4 de mayo, se realiza una misa, previamente los una banda de músicos se moviliza hacia la capilla y se concentra mucha gente desde las primeras horas de la mañana, hasta al atardecer. Posteriormente hacen regresar la imagen del Yayta Cahuac, pero esta vez con los mayordomos entrantes. Y los mayordomos salientes regresan con su banda de música, balando con todos los devotos.
Al día siguiente se hacen algunas concentraciones, en las casas de los mayordomos, y también las autoridades hacen algún reconocimiento a los mayordomos por el sacrificio y por mantener estas tradiciones.
Luego el otro mayordomo, organiza otra procesión, donde la imagen recorre las principales calles del pueblo, pero esta es sin banda, con una pequeña comida para los participantes, y hay termina la fiesta. El día 6 los que quieren continúan, bailando y participando de una comida.
Rumbo a Yanahuanca
Después de escuchar este interesante relato, aproximadamente a las 10.30 de la mañana salí del pueblo, esta vez mi destino era Yanahuanca, lugar donde se produciría el encuentro con los otras personas que participaban de esta marcha llamada “Intinani”.
Para llegar a Yanahuanca, tuve que pasar Yacan, Chaupimarca y Michivilca, camine varias horas sin descansar.
A eso de las 1.30 llegue a Chaupimarca, donde hice una breve parada para comer y tomar un poco de agua, pero el pueblo estaba silencio al igual que el anterior pueblo que había pasado. La enfermera del puesto de salud me informó que todos se fueron a trabajar.
Un vendedor de libros que también venia de Paucar, me indico la ruta que tenia que seguir para llegar a Michivilca. Desde la una parte alta, se podía ver a lo lejos el pueblo de Michivica. Para llegar a ese lugar camine por un camino de herradura y baje por una quebrada, donde había un pequeño puente que estaba encima de riachuelo. Después nuevamente subí un cuesta arriba, pero el camino no era tan pesado. A eso de las 4.00 ya estaba en Michivilca. Ese día todo el pueblo estaba atento al Rally Premio Presidente de la República, que se realizo el 3 de mayo.
Yo ya no podía seguir el camino, pero me dijeron que Yanahuanca estaba a media hora, y que luego de la carrera de autos tendrían que continuar. Así que espere hasta que culmine esta carrera, pero esta vez lo tome un colectivo.
A eso de las 5.00 p.m estuve en Yanahuanca, donde hice un breve recorrido, por algunas calles de la ciudad.
Yanahuanca es muy visitada por los turistas por sus famosos baños termo medicinales de Villo y Tambochacha, ubicadas a 5 kilómetros de la ciudad. (continuará)