Locutorios, la llamada de la fortuna.

La oferta de llamadas telefónicas ha crecido como pasto en el campo. Celulares en alquiler, locutorios y teléfonos monederos con tarifas de locura son el negocio del momento. ¿Y cómo lo hacen? Le contamos el secreto de esta exitosa actividad comercial que se parece a lo que hace poco sucedió con las cabinas de internet.

Cobrar veinte céntimos el minuto por una llamada local o medio sol por el mismo tiempo a provincia o a un teléfono celular se ha convertido en un negocio tan redondo y brillante en nuestro país como una moneda de cincuenta céntimos recién acuñada. La línea para ingresar a este mercado está libre. ¡Llame ya!

No resulta raro que en cualquier barrio de la capital cada día aparezca un nuevo letrero con una oferta atractiva para llamar y deje bien plantado en la esquina al teléfono público de Telefónica. Además, el servicio tiene la ventaja de que usted puede hacer la llamada bien sentado, con privacidad y un contador frente a sus ojos para que no pague ni un minuto de más. Como quien dice, lo justo Tío Pacori.

¡Qué locutorio!

Desde hace dos años los locutorios son un éxito. Esto es posible gracias al desarrollo de la tecnología conocida como VoIP (Voz transmitida sobre Protocolo Internet), la cual aprovecha internet para transmitir voz y que luego es transferida a la línea telefónica convencional. Antes, con el sistema Sky sólo se podía llamar de una computadora a otra y con una calidad que no era óptima.

Conforme se han ampliado las redes de banda ancha, fueron apareciendo empresas de telefonía VoIP. Por ejemplo, una persona que quiere abrir su locutorio adquiere sus equipos adaptadores –entre ellos conversores a llamadas celulares– por un costo aproximado de mil dólares y contacta los servicios de un reseller local –un revendedor de minutos– de las empresas de VoIP. El servidor de esas empresas se encarga de redireccionar las llamadas a la línea convencional del operador telefónico del país de destino al cual le compra grandes volúmenes de minutos para su servicio.

Una de las primeras empresas en brindar telefonía VoIP en nuestro país es la norteamericana Net2phone que opera en ciento veinte países. En el mundo hay más de cien empresas en el rubro.

Además de contar con el servicio de internet, si el interesado incluye gastos como la habilitación del local, el mobiliario y la computadora para controlar el tráfico, su inversión puede llegar a dos mil dólares. La ganancia de las empresas de telefonía VoIP está en la venta de minutos a los minoristas a través de los resellers locales. El caso es que los costos de dichas empresas son tan bajos –al usar internet y comprar el tráfico en cantidad– que les permite vender los minutos muy baratos tanto a quienes tienen locutorios como para quienes lo solicitan para su casa o empresa.

Por ejemplo, uno de los representantes de Net2phone en nuestro país, Enterprise, ofrece las siguientes tarifas para locutorios: S/. 0.09 las llamadas locales, S/. 0.15 las nacionales y S/. 0.09 hacia Estados Unidos. Es decir, si usted cobra S/. 0.20 por una llamada local está ganando el doble. En el caso de las llamadas a celular, en el mercado también puede ser encontrar precios atractivos como S/. 0.26 el minuto. El asunto es que donde más se gana es en las llamadas a provincias (puede cobrar S/. 0.40 el minuto) y en las internacionales, cuyas tarifas varían de acuerdo al país. Cada propietario de locutorio es libre de fijar sus tarifas. Si quiere, hasta puede regalar minutos como parte de una promoción.

Cuánto te cuesta, cuánto te vale


Los usuarios de telefonía móvil descubrieron que los planes más ventajosos de las empresas del mercado permitían tener minutos más baratos. Así empezó el negocio de vender minutos para llamar a celulares. La ganancia promedio es de 100%.

Las tarifas de todos los revendedores locales no son iguales, dependen de con qué empresa de VoIP trabajen y la modalidad de contrato. Puede ser que uno venda el minuto de llamada nacional a S/. 0.10 mientras otro lo oferte a S/. 0.05. En los equipos también hay diferencias, un aparato pueden venderlo en 50 u 80 dólares. También se dan casos donde un paquete de minutos puede incluir minutos gratis a algún destino.

"El caso es que las empresas ponen los precios de sus minutos de acuerdo con la calidad del servicio que brindan, al número de clientes que tengan a nivel mundial, o por convenios con los operadores locales de telefonía convencional. En Estados Unidos, por ejemplo, un número considerable de llamadas se hacen vía VoIP y eso ha generado más competencia y precios bajos", señala Sail Castillo, de la empresa HSM que brinda asesoría en la instalación de locutorios.

¿Cuál ha sido el efecto de los locutorios sobre los operadores locales? En abril de este año Telefónica reconoció que el incremento de locutorios había afectado sus ingresos del primer trimestre . Tal vez por eso ahora ofrece instalación de locutorios con tarifas promedio de dicho mercado. El ingeniero José Juárez, gerente general de Enterprise, estima que casi el 80% de las 33 mil cabinas internet del país ya brindan servicio de llamadas VoIP, mientras que otros solo están adquiriendo internet para abrir locutorios. Esta tecnología opera en el mundo desde el año 2000, pero acá recién es conocida. "Cuando hace un tiempo daba conferencias a empresarios para informarles sobre el ahorro en llamadas por VoIP, no me creían, decían que les estaba vendiendo pajaritos", recuerda el ingeniero Juárez.

Muchas personas pueden ver un locutorio como un negocio de centavitos por las tarifas tan bajas. La realidad es otra, pues en las llamadas se puede ganar entre el 100% o 250%."La gente acude porque los precios son atractivos. Si del teléfono de mi casa el minuto al extranjero me cuesta dos soles, preferiré el locutorio, donde voy a pagar solo cincuenta céntimos pero voy a llamar más tiempo. La ganancia depende de la ubicación y de la competencia, pero puede estar sobre los mil quinientos o dos mil soles mensuales. Por eso la cantidad de locutorios es enorme. Si antes había solo uno en una cuadra, ahora hay cuatro", señala el ingeniero Sail Castillo.

Pero, ¿existe la posibilidad de que los operadores locales como Telefónica hagan algo para restringir el negocio de los locutorios? Sandro Marcone, gerente general de la Red Científica Peruana, que tambié brinda servicio VoIP, señala que si bien nuestra legislación tiene un vacío en el tema, lo más probable es que dicho servicio sea regulado sin afectar esos rentables negocios. "Esto debería verse como un avance tecnológico, en el mercado corporativo las llamadas VoIP han creado una mayor competencia con los operadores convencionales", manifiesta el experto. Por eso, no será raro que hoy usted vea un nuevo locutorio en su barrio.

Telefónica versus los bodegueros


La guerra de precios de los locutorios ha ocasionado que se llegue a ofrecer el minuto de llamada local a sólo diez céntimos.

• En el negocio de los teléfonos monederos inteligentes que suelen colocar los bodegueros en sus locales, el sistema consiste en comprar esos aparatos chinos a uno de los siete importadores locales, a un costo promedio de 500 dólares, para luego conectarlo a una línea telefónica clásica residencial y programarlo para permitir llamadas públicas.

• Si Telefónica cobra al usuario por un minuto de llamada local S/.0.58 y el dueño del teléfono cobra S/. 020, su ganancia aproximada será de S/.0.14 . Si un minuto nacional le cuesta S/. 0.20, el bodeguero programará su teléfono para que cobre S/. 0.50. En el caso de celulares, Telefónica cobra S/. 1.00 en la línea clásica y el bodeguero vende veinticinco segundos por S/. 0.50, en este caso la ganancia es mínima, pero atrae público.

• Telefónica, al observar que este negocio crecía –se han importado más de dieciocho mil teléfonos monederos inteligentes para usarlos con líneas clásicas–, trató de cambiar el contrato a quienes tenían esos teléfonos de residencial a comercial. El caso llegó hasta Ositpel. Actualmente, el organismo regulador tiene un proyecto para formalizar los teléfonos monederos.

• En el caso de los TPI (teléfonos públicos de interior de Telefónica), dicha empresa arrienda un espacio del local, por ejemplo una bodega, y paga a los dueños del local o de la bodega un porcentaje que oscila entre el 10% y el 26% del tráfico mensual.

La llamada de la calle


El uso de teléfonos monederos inteligentes con línea residencial será regulado por Osiptel.

Se les puede encontrar en cualquier calle, con sus chalecos, mesitas y con varios teléfonos móviles encadenados a sus manos. Aparecieron en emporios comerciales como Gamarra, Mesa Redonda o La Parada. Son los vendedores de llamadas a celular. Los carteles tienen las tarifas y las marcas del operador: Movistar, Claro y Nextel. La tarifa es de S/. 0.20 el minuto a fijo local y S/. 0.50 a celular. No es un negocio nuevo –"hace como un año que hago esto", nos dijo un pata reticente–, pero en los últimos meses se ha convertido en un cachuelo masivo.

¿Y cómo lo hacen? Aunque las empresas cuyas líneas son usadas se negaron a ofrecer detalles, algunos comerciantes callejeros dieron pistas: una forma es contratar teléfonos post pago con planes que brinden la mayor cantidad de minutos y tarifas atractivas. Por ejemplo, en Claro un plan da 1,300 minutos por 335 soles mensuales. Si se ofrece cada minuto a S/.0.50 la recaudación total será 650 soles. La diferencia –315 soles– es para el telefonista ambulante. Telefónica tiene planes que ofrecen 1,500 minutos por 100 dólares y la figura se repite.

Los operadores tienen una posición clara: como la reventa de sus servicios no está permitida, alguien que contrata un servicio y le da un uso público puede sufrir la resolución del contrato. Extraoficialmente, se sabe que Telefónica considera que para este negocio callejero se necesita una concesión, que los vendedores no están pagando impuestos y que el Estado debería normar el tema. Actualmente Osiptel tiene una propuesta para formalizar la reventa de llamadas a través de contratos entre los operadores y los comercializadores. (Raúl Mendoza)