Para algunos el tatuaje es una muestra permanente de locura momentánea pero lo real y concreto es que se trata de una modificación del color de la piel, creando un dibujo, figura o texto realizados con tinta o algún otro pigmento bajo la epidermis de un humano o animal. La definición del diccionario indica que es una marca con tinta indeleble que se graba sobre la piel con una imagen que se escoge de acuerdo con la personalidad de quien lo lleva y que tiene una finalidad decorativa o simbólica. Los brazos, el pecho y la espalda son las partes del cuerpo en las que con mayor frecuencia se hacen los tatuajes, aunque hay quienes los llevan en partes íntimas.
Leslie Stewart tiene varios tatuajes en el cuerpo y entre ellos una cruz de varios colores en el cuello bajo la nuca. La simbología es obvia pero ahora optó por una estrella de cinco puntas, en tono morado, que fue colocada a la izquierda de la cruz que tiene tonos turquesa.
Carlos Cacho también tiene tatuajes en varias partes de su cuerpo pero esta vez escogió una muñequera en delineado negro aunque quería que le hicieran un diseño que semejara a una piedra preciosa de colores en el centro. En otras palabras, una joya tatuada. La simbología se la dejamos a los sicólogos.
En cuanto a Carla Tarazona, el hecho de perforarse la nariz para colocarse un piercing que un poco más grande que la cabeza de un alfiler, ha sido únicamente seguir el ritmo de la moda, aunque diijo que de ninguna manera se colocaría un arete en las cejas y menos en otros lados del cuerpo. Estoicamente sosportó la aguja que le permite ahora lucir un brillito en la aleta izquierda de su nariz.
El termino tatuaje deriva de la palabra Ta-tau, que en polinesio significa marca sobre la piel y es un vocablo que fue introducido en Europa en el siglo XVIII por el explorador ingles James Cook, tras uno de sus viajes por los Mares del Sur. Entre los pueblos primitivos, tatuarse no tenia nada de transgresivo, sino que incluso era un signo de integración social. Los maoríes de Nueva Zelanda solían tatuarse la cara como signo de distinción. El dibujo, llamado moko, hacía a la persona única e inconfundible, como las huellas dactilares. De hecho, los maoríes usaban la reproducción de su moko como firma en los documentos.
El tatuaje nace con el hombre. La momia de Similaun (el cuerpo de un caminante que murió congelado hace 5300 años en los hielos alpinos) tiene uno en la espalda. Los egipcios practicaban la técnica del tatuaje ya en el 2000 a.C. También los Escitas del Asia se tatuaban, encontrándose varias momias con grandes tatuajes. El tatuaje en color alcanzó gran desarrollo entre los maoríes de Nueva Zelanda y en el pasado fue una forma popular de adorno en China, India y Japón, así como en numerosos pueblos primitivos de Colombia, Brasil y la región del Gran Chaco (Argentina, Paraguay y Bolivia). Existía la creencia de que los tatuajes protegían contra la mala suerte y las enfermedades. También se utilizaban como identificadores del prestigio social, del rango o de pertenencia a un grupo determinado. Sin embargo, se ha usado frecuentemente como adorno.
Stefano Alcántara, es uno de los maestros del tatuaje. Decide abrir Stefano’s Tattoo a principios de 1994, hace más de 11 años, demostrando desde un principio que llegaba para quedarse y no precisamente sólo en Lima. Tuvo la oportunidad de viajar por Hawaii, New York, Los Ángeles, y Miami, entre otros lugares, gracias a su talento demostrando que el arte corría por sus venas e inmortalizando su arte plasmado en la piel de miles de personas.
Prefiere los trabajos con full color, demostrando creatividad en cada uno de sus trabajos. Otra de sus especialidades son los retratos, a los cuales solo le faltan hablar para terminar de darle el realismo que solo él sabe darles.
Siempre estará dispuesto a realizar de un simple diseño, una pieza única que solo sus lienzos andantes tienen el placer de portarlo.
Por su parte, Marcelo Álvarez, artista argentino, de 26 años nació en la Ciudad de Buenos Aires en el año 1979. Con solo 8 años de edad inició sus estudios en dibujo y pintura, y a los 17 se inició en el mundo del tatuaje bajo la instrucción de Jorge Payeras, uno de los pioneros del tattoo en Argentina. Allá no solo aprendió sobre técnicas del tatuaje, sino también sobre esterilización y los cuidados necesarios de los cuales todo artista profesional debe tomar conciencia y responsabilidad.
Luego de dos años de intenso trabajo pasó a formar parte de uno de los estudios profesionales (Universal Tattoo) más importantes de la Galería Bond Street, galería precursora en el mundo del tattoo en Buenos Aires.
Finalmente después de tres años de experiencia en Universal Tattoo, apostó por Lima, donde reside desde hace casi tres años, destacándose sobre todo por sus trabajos en grises, realismos, diseños exclusivos y piezas enteras (brazos completos, espaldas, etc.). Cabe destacar que Marcelo, ingresó al staff de Stefano’s Tattoo a fines del 2004.
Aunque uno tiene la libertad de elegir en que lugar del cuerpo se va a hacer un piercing, los lugares mas comunes son:
- piercing en la lengua
- piercing en el ombligo
- piercing en la ceja
- piercing en la nariz
- piercing en la oreja
Leslie Stewart tiene varios tatuajes en el cuerpo y entre ellos una cruz de varios colores en el cuello bajo la nuca. La simbología es obvia pero ahora optó por una estrella de cinco puntas, en tono morado, que fue colocada a la izquierda de la cruz que tiene tonos turquesa.
Carlos Cacho también tiene tatuajes en varias partes de su cuerpo pero esta vez escogió una muñequera en delineado negro aunque quería que le hicieran un diseño que semejara a una piedra preciosa de colores en el centro. En otras palabras, una joya tatuada. La simbología se la dejamos a los sicólogos.
En cuanto a Carla Tarazona, el hecho de perforarse la nariz para colocarse un piercing que un poco más grande que la cabeza de un alfiler, ha sido únicamente seguir el ritmo de la moda, aunque diijo que de ninguna manera se colocaría un arete en las cejas y menos en otros lados del cuerpo. Estoicamente sosportó la aguja que le permite ahora lucir un brillito en la aleta izquierda de su nariz.
El termino tatuaje deriva de la palabra Ta-tau, que en polinesio significa marca sobre la piel y es un vocablo que fue introducido en Europa en el siglo XVIII por el explorador ingles James Cook, tras uno de sus viajes por los Mares del Sur. Entre los pueblos primitivos, tatuarse no tenia nada de transgresivo, sino que incluso era un signo de integración social. Los maoríes de Nueva Zelanda solían tatuarse la cara como signo de distinción. El dibujo, llamado moko, hacía a la persona única e inconfundible, como las huellas dactilares. De hecho, los maoríes usaban la reproducción de su moko como firma en los documentos.
El tatuaje nace con el hombre. La momia de Similaun (el cuerpo de un caminante que murió congelado hace 5300 años en los hielos alpinos) tiene uno en la espalda. Los egipcios practicaban la técnica del tatuaje ya en el 2000 a.C. También los Escitas del Asia se tatuaban, encontrándose varias momias con grandes tatuajes. El tatuaje en color alcanzó gran desarrollo entre los maoríes de Nueva Zelanda y en el pasado fue una forma popular de adorno en China, India y Japón, así como en numerosos pueblos primitivos de Colombia, Brasil y la región del Gran Chaco (Argentina, Paraguay y Bolivia). Existía la creencia de que los tatuajes protegían contra la mala suerte y las enfermedades. También se utilizaban como identificadores del prestigio social, del rango o de pertenencia a un grupo determinado. Sin embargo, se ha usado frecuentemente como adorno.
Stefano Alcántara, es uno de los maestros del tatuaje. Decide abrir Stefano’s Tattoo a principios de 1994, hace más de 11 años, demostrando desde un principio que llegaba para quedarse y no precisamente sólo en Lima. Tuvo la oportunidad de viajar por Hawaii, New York, Los Ángeles, y Miami, entre otros lugares, gracias a su talento demostrando que el arte corría por sus venas e inmortalizando su arte plasmado en la piel de miles de personas.
Prefiere los trabajos con full color, demostrando creatividad en cada uno de sus trabajos. Otra de sus especialidades son los retratos, a los cuales solo le faltan hablar para terminar de darle el realismo que solo él sabe darles.
Siempre estará dispuesto a realizar de un simple diseño, una pieza única que solo sus lienzos andantes tienen el placer de portarlo.
Por su parte, Marcelo Álvarez, artista argentino, de 26 años nació en la Ciudad de Buenos Aires en el año 1979. Con solo 8 años de edad inició sus estudios en dibujo y pintura, y a los 17 se inició en el mundo del tatuaje bajo la instrucción de Jorge Payeras, uno de los pioneros del tattoo en Argentina. Allá no solo aprendió sobre técnicas del tatuaje, sino también sobre esterilización y los cuidados necesarios de los cuales todo artista profesional debe tomar conciencia y responsabilidad.
Luego de dos años de intenso trabajo pasó a formar parte de uno de los estudios profesionales (Universal Tattoo) más importantes de la Galería Bond Street, galería precursora en el mundo del tattoo en Buenos Aires.
Finalmente después de tres años de experiencia en Universal Tattoo, apostó por Lima, donde reside desde hace casi tres años, destacándose sobre todo por sus trabajos en grises, realismos, diseños exclusivos y piezas enteras (brazos completos, espaldas, etc.). Cabe destacar que Marcelo, ingresó al staff de Stefano’s Tattoo a fines del 2004.
Aunque uno tiene la libertad de elegir en que lugar del cuerpo se va a hacer un piercing, los lugares mas comunes son:
- piercing en la lengua
- piercing en el ombligo
- piercing en la ceja
- piercing en la nariz
- piercing en la oreja
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