En el año 2008, 40 mil niños de las zonas más pobres del país tendrán su laptop o minicomputadora portátil, en el marco del programa One Laptop per Child (OLPC), que auspician diversos organismos internacionales y al cual se ha suscrito entusiastamente el gobierno peruano.
Sin embargo, los pequeños no serán los únicos que contarán con un instrumento educacional tan importante. También lo tendrán 100 mil profesores, gracias a las facilidades que el gobierno pondrá a su alcance.
Éstas consistirán en un crédito de US$ 300, a una baja tasa de interés y un plazo de cuatro años, y un subsidio de US$ 150, que les permitirán adquirir computadoras personales.
Otro proyecto previsto por el gobierno para el próximo año es el de dotar a 15 mil aulas con televisores, reproductores de DVD y antenas de televisión por cable, con el fin de mejorar sustantivamente la calidad de la información que reciben los estudiantes de todo el país.
Con iniciativas como éstas se busca remontar poco a poco el deshonroso lugar que ocupa nuestro país en materia educativa en los diversos rankings internacionales. Sin embargo, por sí solas no resultarán suficientes. Deberán ser complementadas con otras fundamentales, como la mejora de los programas y currículas, la intensificación de las evaluaciones a los profesores (que permitan una mucho más rigurosa selección de éstos), una política salarial que incentive el rendimiento académico, y otras medidas urgentes.