El economista jefe del BBVA para América Latina y Mercados Emergentes, Giovanni Di Placido, denominó "El Milagro Peruano" al período de crecimiento sostenido y diversificado que ostenta la economía del Perú, que está permitiendo generar empleo no sólo en Lima sino en todo el país.
Destacó que la actividad económica y el empleo en diversas regiones del país están creciendo más rápido que en Lima, y ese es un elemento clave para solventar una de las tareas más complejas, como la disminución de la pobreza, y lo más importante, apuntalar una mayor cohesión social.
"Si hacemos uso del vetusto concepto de Indice de Miseria, muchas veces utilizado por los propulsores de protestas, que no es más que la suma de inflación y desempleo, los avances son indudables", destacó.
Comentó que la inflación es una de las más bajas de la región (2.8 por ciento), a pesar de los choques de oferta que han inducido alzas en los precios de los combustibles y alimentos. "La inflación baja es una buena noticia para los trabajadores: los aumentos salariales no se van a diluir con las subidas de precios".
Dijo que el dinámico crecimiento económico ha inducido un incremento en la tasa de participación, es decir, el peso de la población económicamente activa dentro de la población total.
Aunque la tasa de participación se elevó, la generación de empleo fue suficiente para colocar la tasa al cierre del 2006 en 8.5 por ciento, la más baja registrada desde el 2000, precisó Di Placido en un artículo publicado en la revista "Qué pasa", de Chile.
Además, señaló que el Tratado de libre Comercio con Estados Unidos, que elevaría el Producto Bruto Interno (PBI) en 0.6 puntos durante los primeros cinco años, consolidará 700 mil empleos y generará otros 50 mil.
Placido elogió también la reducción de la deuda pública peruana que pasó de 46.7 por ciento en el 2002 a menos del 30 por ciento en la actualidad.
"El gobierno ha logrado extender el plazo medio de la deuda.Perú es uno de los pocos países de la región que tienen una regla fiscal como marco institucional para la política fiscal.El superávit en la primera mitad del año se ha ubicado en 8.2 por ciento del PBI", señaló.
Además, el economista consideró impresionante la holgura que registra el sector externo, pues el resultado de cuenta corriente ha registrado niveles superavitarios récords en los últimos años.
"La economía peruana registra un creciente flujo de recursos privados del exterior.Las reservas internacionales proveen de un adecuado blindaje a la economía frente a choques externos", resaltó.
Placido dijo que este desempeño esta siendo reconocido por los mercados, ya que las primas de riesgo que se asocian a la deuda son las más bajas luego de Chile y México.
La consolidación de estos logros y su sostenibilidad pasa por implantar una serie de reformas que consoliden la situación fiscal, se incremente la inversión privada, la optimización del peso de la deuda y avanzar en la menor desigualdad y mayor cohesión entre la población.
"La buena noticia es que todos estos temas están en la agenda de los gestores de la política económica del Perú", concluyó.
Destacó que la actividad económica y el empleo en diversas regiones del país están creciendo más rápido que en Lima, y ese es un elemento clave para solventar una de las tareas más complejas, como la disminución de la pobreza, y lo más importante, apuntalar una mayor cohesión social.
"Si hacemos uso del vetusto concepto de Indice de Miseria, muchas veces utilizado por los propulsores de protestas, que no es más que la suma de inflación y desempleo, los avances son indudables", destacó.
Comentó que la inflación es una de las más bajas de la región (2.8 por ciento), a pesar de los choques de oferta que han inducido alzas en los precios de los combustibles y alimentos. "La inflación baja es una buena noticia para los trabajadores: los aumentos salariales no se van a diluir con las subidas de precios".
Dijo que el dinámico crecimiento económico ha inducido un incremento en la tasa de participación, es decir, el peso de la población económicamente activa dentro de la población total.
Aunque la tasa de participación se elevó, la generación de empleo fue suficiente para colocar la tasa al cierre del 2006 en 8.5 por ciento, la más baja registrada desde el 2000, precisó Di Placido en un artículo publicado en la revista "Qué pasa", de Chile.
Además, señaló que el Tratado de libre Comercio con Estados Unidos, que elevaría el Producto Bruto Interno (PBI) en 0.6 puntos durante los primeros cinco años, consolidará 700 mil empleos y generará otros 50 mil.
Placido elogió también la reducción de la deuda pública peruana que pasó de 46.7 por ciento en el 2002 a menos del 30 por ciento en la actualidad.
"El gobierno ha logrado extender el plazo medio de la deuda.Perú es uno de los pocos países de la región que tienen una regla fiscal como marco institucional para la política fiscal.El superávit en la primera mitad del año se ha ubicado en 8.2 por ciento del PBI", señaló.
Además, el economista consideró impresionante la holgura que registra el sector externo, pues el resultado de cuenta corriente ha registrado niveles superavitarios récords en los últimos años.
"La economía peruana registra un creciente flujo de recursos privados del exterior.Las reservas internacionales proveen de un adecuado blindaje a la economía frente a choques externos", resaltó.
Placido dijo que este desempeño esta siendo reconocido por los mercados, ya que las primas de riesgo que se asocian a la deuda son las más bajas luego de Chile y México.
La consolidación de estos logros y su sostenibilidad pasa por implantar una serie de reformas que consoliden la situación fiscal, se incremente la inversión privada, la optimización del peso de la deuda y avanzar en la menor desigualdad y mayor cohesión entre la población.
"La buena noticia es que todos estos temas están en la agenda de los gestores de la política económica del Perú", concluyó.